martes, 21 de marzo de 2017

Libertad.

Esos momentos en los que pensamos que el destino nos la tiene jurada. Esos momentos en los que pensamos en lo que hemos hecho con nuestra vida y nos arrepentimos de muchas cosas. Momentos en los que nos quejamos de lo que no hicimos. Momentos de dolor, pánico y tristeza que a veces deseamos no haber vivido. Momentos de nuestra vida que pensamos que son horribles.
Esos momentos, los tenemos que apreciar y agradecer.
Son cosas de la vida que nos han ayudado a formarnos como personas.
Si el destino nos la tiene jurada, no sera por mal, sino para ayudarnos a que tengamos elección, porque solo nosotros elegimos ir por un camino u otro.
No debemos arrepentirnos de nuestros actos, a no ser que sean actos verdaderamente horribles, que hayan dañado a personas físicamente o psicológicamente. Nuestros actos nos han ayudado a conocer personas que al mismo tiempo nos han ayudado a crecer, a evitar personas que nos podrían haber hecho mucho daño o, puede que no hayamos podido a conocer a personas realmente estupendas, pero si estamos destinados/as a conocerlas, en algún momento de nuestra vida volveremos a encontrarlas.
No debemos desear momentos de nuestras vidas, porque esos momentos nos han ayudado a ser más fuerte y a madurar. Es cierto que no es bonito perder a alguien que se quiere, pero tenemos que pensar que todo el mundo muere algún día, aquí solo estamos de paso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario